En un mundo donde el drag ha dejado de ser un arte underground para convertirse en un fenómeno global, sigue siendo fascinante descubrir nuevas voces que aportan frescura y autenticidad al escenario. Y eso es precisamente lo que representa La Escándalo. Con tan solo 26 años, la artista originaria de Castellón tuvo un paso breve pero memorable por el taller de Drag Race España.

Desde su entrada al werkroom, su presencia llamó la atención por su estética pulida. Su propuesta para el talent show encantó al público y al jurado gracias a su carisma y a su humor inteligente. Pese a haber protagonizado una doble eliminación, La Escándalo dejó momentos destacados en esta temporada: desde su divertida interpretación de Magüi, de Paquita Salas, hasta su deslumbrante paso por la alfombra roja en el tercer episodio.

Su historia refleja la evolución de una generación de artistas que crecieron viendo Drag Race y que hoy forman parte de ese mismo universo que un día las inspiró. En su caso, el paso de espectadora a participante ha sido también un viaje de autodescubrimiento: de admirar a las grandes queens internacionales a reivindicar el valor del drag patrio, las transformistas y el folclore español.

A lo largo de esta entrevista, hablamos sobre su experiencia en el programa, los retos a los que se enfrentó y su relación con las redes sociales. También nos cuenta cómo nació su divertido número del talent show, qué personajes barajaba para el Snatch Game y cuáles son sus planes para el futuro de su carrera.

Antes de empezar, me gustaría felicitarte por el lip sync. Se os veía muy divertidas, con ganas de pasarlo bien, y creo que eso es un poco lo que espera el público: que sea algo entretenido. Lo que más me ha sorprendido de ti es que eres muy joven y tienes un drag muy pulido. ¿Cuánto tiempo llevas dedicándote al drag?

Empecé en 2017, así que llevo ocho años dedicándome a ello.

¿Y cuál fue para ti el mayor reto dentro del programa?

Me he presentado a todas las temporadas, así que ya estás preparadísima para todo: para los comentarios, tanto positivos como negativos. Mi mayor reto dentro del programa ha sido hacerme notar. Había muchas personalidades muy fuertes y yo soy una persona muy tranquila, que se eleva cuando está en drag. Lo que pasa es que la mayor parte del tiempo en el programa no estás en drag, solo lo estás para los retos. Lo demás no me preocupaba absolutamente nada. Creo que soy muy completa; hubiese hecho los retos bien, y de hecho estoy contenta porque me he ido a casa, pero no los hice mal.

En el primer episodio, cuando entraste, una compañera comentó que tenías una relación bastante cercana con las redes sociales. ¿Cómo ha sido para ti estar en el concurso y recibir toda la atención que ello conlleva?

La gente que yo esperaba que me odiase, me ha odiado, y eso me da igual. Pero es guay, porque me he encontrado con un montón de gente a la que le gusta mucho lo que hago. Soy una drag que ya tenía fans en España, y el cariño de esa gente que ya me conocía se ha multiplicado por tres. Y sobre todo, ha sido muy bonito darme a conocer a gente que no me conocía. Me hubiese gustado estar más tiempo para que me conociesen mejor, pero bueno.

Me encantó tu talent show. ¿Cómo se te ocurrió la idea?

Tenía claro que quería hacer una canción original, porque quería enseñar que me gusta mucho el doblaje. El año pasado hice un spoken word con partes en las que imitaba personajes, con una voz muy de doblaje, pero quería meter eso en una canción original y hacerlo divertido. Unos días antes me encontré con la canción Ponte el cinturón, que ya conocía pero no la tenía en la cabeza. Luego, no sé por qué, la relacioné con If You’re Happy. Le dije a una amiga: “Hazme una demo, júntame estas dos canciones”. Y funcionaba muy bien. La letra literalmente la saqué en una tarde y la grabé en casa. Fue bastante guay, porque intento que mi drag no sea muy sexual. Siempre que hago humor intento que sea reírme de mí misma o que sea un humor muy estúpido. En este caso podía hacer algo sexual sin que fuese muy explícito y hacerlo divertido, para todos los públicos.

¿Empezaste a hacer drag por Drag Race o no?

Sí. De pequeño vi un show drag con mi madre en unas fiestas de mi pueblo, y como que se me quedó un poco. Mi madre siempre ponía en Carnaval la gala drag de Gran Canaria. Cuando tenía unos 18 años, que me fui a la universidad y empecé a vivir solo, descubrí Drag Race. Vi primero la temporada 2, luego la 5 y la 6, y después el All Stars 2. Entonces dije: “Tengo que hacer esto”. Y ahí es cuando empecé. Me gasté un montón de dinero en maquillaje (que no hace falta, solo hay que saber comprar bien). Mi drag nace de Drag Race, al final. Y luego empiezas a descubrir que hay gente que hace drag no solo en televisión, sino de toda la vida. Ahí empecé a conocer a las transformistas, gente que hacía folclore, porque eso sigue existiendo. Tenemos a La Patrick en Barcelona, por ejemplo. Me gustó mucho descubrir eso a raíz de Drag Race, pero valoro muchísimo nuestro drag patrio.

Hablando un poco del último episodio, ¿os resultó muy difícil poneros de acuerdo sobre a quién dejar el corazón?

Tuvimos que tomar una decisión conjunta. Cada una quería dárselo a personas distintas por afinidad, básicamente. Luego llegamos a la conclusión de que, si no íbamos a dárselo a quien queríamos, buscáramos a alguien en común. Y ahí es cuando ya no pensamos tanto en la persona, sino en cómo podía afectar al concurso. Sabíamos que venía el Snatch Game, porque todas las temporadas el capítulo 5 es Snatch Game. Y pensamos: “Vamos a dárselo a alguien que creemos que lo va a hacer bien, para que el peso de la decisión caiga sobre esa persona”. Que el corazón no lo tenga alguien que esté en el bottom y pueda salvarse, sino que tenga un poquito de chicha.

¿Qué personajes barajabas para el Snatch Game?

He mandado muchas cosas todos los años: Gloria Serra, La Pelopony, Rosalía… Y este año iba con “la ruleta de la suerte” (Wheel of Fortune), rollo que yo tenía la ruleta aquí, mi cara en medio, la iba girando, tenía premios… Era muy bipolar: muy feliz y, de repente, llorando, vomitando, mareada, harta de girar veinte años y no ver dinero. Creo que hubiese sido muy divertido, porque daba juego para interactuar con las personas de al lado. Seguramente hubiese estado salvada (risas).

¿Quién te gustaría que ganara esta temporada?

Es que hay mucha gente buena esta temporada. Yo dije que quería entrar en una temporada en la que cada eliminación doliera, y con el casting que hicieron esta vez, está pasando eso. Entonces, porque creo que representa la esencia del drag de este país, que aporta algo cañí, pero al mismo tiempo sabe adaptarse a los tiempos, y además porque lo que hizo en el capítulo 3 me pareció un bitch move de la hostia, quiero que gane Satín Greco.

¿Qué planes tienes para tu carrera?

Voy a seguir trabajando más o menos al mismo ritmo que antes. El drag no es mi fuente principal de ingresos. Cuatro o cinco bolos al mes, perfecto. Eva y yo vamos a sacar una nueva versión de Duro de pelar, que se llama Dura de pelar. Tiene una base súper Abracadabra, súper guay, y se está subiendo a plataformas. Y luego tengo un show con Ferrxn en Barcelona, que va a ser un poquito como El secreto de Puente Tieso.

Drag Race España temporada 5 se emite todos los domingos en atresplayer en España y exclusivamente en WOW Presents Plus en el resto del mundo.